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Deathadder Essential - Ratón óptico para juegos de esports
Deathadder Essential - Ratón óptico para juegos de esports
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Sensor óptico 4G de 6400 dpi. El nuevo Razer DeathAdder incorpora el primer sensor óptico de 6400 dpi del mundo. Alcanza un alto rendimiento sin sacrificar la sensación del sensor óptico que tanto gusta a los usuarios del DeathAdder. El sensor 4G de este ratón se ha optimizado para funcionar a la perfección con todas las alfombrillas Razer. Solo tienes que elegir una de las alfombrillas Razer predefinidas en Synapse 2.0 para calibrar el sensor, o usar el modo de calibración manual si utilizas una superficie personalizada. Consigue 200 ips y una aceleración de 50 G incluso con la configuración de dpi más baja. Así, aunque la sensibilidad del ratón se reduzca, se adapta al movimiento físico de tu mano sobre la superficie para una respuesta casi instantánea entre el ratón y el juego. El sensor del nuevo Razer DeathAdder no tiene control de deriva, lo que te permite realizar movimientos precisos en el juego, algo fundamental para los jugadores de FPS que buscan el disparo a la cabeza perfecto. Este es el máximo nivel de precisión en juegos con un sensor de ratón óptico.
- El Razer DeathAdder sigue ofreciendo a los jugadores la experiencia de juego más cómoda hasta la fecha. Diseñado a la perfección para ajustarse cómodamente a la palma de la mano, o para un control igual de preciso con un agarre de garra.
- Equipado con un sensor óptico 4G de 6400 DPI, el Deathadder te permite moverlo a velocidades rápidas o lentas, y siempre responderá en pantalla con una precisión exacta y una fluidez orgánica.
- El punto de apoyo sobre el que se asientan los dos botones principales está diseñado para ofrecer un rebote perfecto al tacto, proporcionando la seguridad absoluta de que se ha accionado el interruptor inferior.
- Ya sea que juegues a velocidades rápidas o lentas, el Deathadder Essential siempre responderá en pantalla con una precisión asombrosa y la fluidez orgánica que solo es posible con un sensor óptico.
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